El fallecimiento de Jorge Mario Bergoglio, el Papa Francisco, ha conmovido profundamente no solo al mundo católico, sino también a quienes integramos la economía social. Su legado trasciende el ámbito religioso: fue un ferviente defensor del cooperativismo y el mutualismo, a los que consideró pilares clave para construir un mundo más justo, humano y solidario.